Plan A: Subir a Zenzano, con todo preparado, planificado y cargada la Ruta, Plan B: Ruta del Mantible. Esto pensaba a las 3.00 de la mañana del sábado cuando estaba cayendo el aguacero. A las 7.00 no llueve, menos mal Plan A, no es por desmerecer el Mantible y ser pretenciosos, pero se nos queda pequeña esta bonita ruta.
Salimos a las 7.30, ya que van a ser 63 Km y no sabemos lo duros que serán, nada mas salir en los soportales de Club Deportivo, 1ª parada para poner el chubasquero, vuelve a llover, cogemos en Caminos Viejo dirección Alberite donde nos espera Pablo y 2ª parada, hacer un apaño al freno de su rueda de alante que como siempre comienza frenada, solucionamos los percances, volvemos a quitarnos el chubasquero y en las bodegas tiramos por el camino que lleva a Ribafrecha.
Hoy tocaba que me vacilaran porque salía con guardabarros y se ponía en duda mi condición sexual por llevarlo, pero como dice el refrán "ande yo con el culo seco, ríase la gente" o algo así. La primera parte estaba transitable, pero cuando empiezan las viñas el barro se comenzaba a pegar a las ruedas como el cemento armao, se va acumulando tanto que decidimos en el primer cruce desviarnos hacia la carretera y llegar por esta a Ribafrecha, dirección Ventas Blancas, pasamos el rio, subimos las revueltas y como no, primer fallo del track, nos pasamos el camino de la derecha, que debe ser el de los almendros y avanzamos unos Km buscando el desvió hasta que decidí dar la vuelta hasta que cogimos el camino bueno.
Una vez enfilados, a subir rampas (que no se ven en el satélite) hasta la granja donde se coge por fin la pista que sube a Zenzano, la Primera parte es la mas dura, empinada y recta (no es porno marranos), pista ancha que se hace muy larga, por lo que se decide parar para almorzar.
Después, todo de ve de otra manera, el camino se suaviza y hay hasta alguna pequeña bajada, se entra en los pinos y el paisaje precioso, con un desfiladero que impresiona a nuestra izquierda, de hay pin-pan hasta Zenzano, entramos en las nubes y comienza a llover, otra vez chubasquero. Lluvia y frió por lo que la parada fue rápida, además íbamos tarde sobre el horario previsto. De ahí continuamos recto hasta que a unos 300m cogemos el camino de la derecha para subir al mirador, me imaginaba una dura subida andando, pero no, solo unos metros tuvimos que bajarnos.
Arriba, las vistas son la ostia, no tiene otra expresión, además con la niebla y el viento impresionaba más aun. Cogemos con alivio, por fin la pista de bajada, que con las piedra y la lluvia estaba muy peligrosa, con precaución bajamos ya que el barro hacia que la bici se deslizara peligrosamente, aun así con el barro y la velocidad, nos pusimos como niños de barro, los cabrones no me avisaron que llevaba el guardabarros torcido, el Miguel, que tenia ganas de una de estas, decidió caerse en un charco para ensuciar también los laterales de la ropa ya que solo estábamos manchados por delante y por detrás. En el desvió que según mi GPS iba a puente Lainez, decidimos dejarlo para otro día ya que era tarde y volvemos a enlazar con la subida de la granja, de ahí vuelta a pueblo por mas barro, por lo que ya en Ribafrecha se decide tirar por carretera, que largo y aburrido se hace, además las fuerzas ya flaquean, dejamos a Pablo en Villamediana y a lavar la Bici, para casa a las 12.30 con ganas de una ducha caliente.
ei
ResponderEliminarhola chico que guapo estas,te queda muy bien ese casco tan chulo cuidate.
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