Con gran devoción, hoy toca
adorar a un santo que según la leyenda lo hicieron santo debido a las perrerías
que le hicieron antes de matarlo, menos al que los romanos no tenían feisbuk
sino menudas polémicas. A San Tirso lo condenaron a ser cortado en dos y la
providencia hizo que la sierra se desafilara y aumentara de peso por lo que sus
verdugos no pudieron cortarlo y eso es lo que paso el domingo con la ruta; que
tuvimos que cortarla en dos.
El verdugo en esta ocasión fue
Ismael E, que gracias a la propuesta “demasiado suave” que había hecho Oscar,
salió por mayoría simple, muy seguida por la plancha y el aspirador que quedo
en segundo lugar. Por lo que otra vez para el norte aunque tampoco me importo
mucho pues no había vuelto a San Tirso desde el día del helicóptero hace ya
tres años donde seriamente nos planteamos federarnos.
Quedamos en la gasolinera de la
rotonda del 4º puente para ir por el Corvo tranquilamente aunque unos mas
tranquilos que otros. ¿qué pasa, hay miedo? ¿se nota que alguno sale con la
flaca y puede ser reconocido por la zona?...intolerantes.....
Pues a si de tranquilos vamos
hacia Viñaspre y vemos en una viña un tractor volcado, menos mal que a Jorge se
le encendió la bombilla y miramos haber que no hubiera nadie dentro del
tractor, como así fué seguimos avanzando y en estas subidas larga y aburridas
donde me quedo atrás solo voy dando forma a la siguiente teoría que Jorge se
encargo de demostrar:
Andar en bici e ir de chachara
puede ser peligroso, el oxigeno se utiliza para alimentar los músculos
inferiores, priorizándolo sobre el
cerebro, es por ello que tanto la bici como el sexo resultan tan satisfactorios
ya que el cerebro deja de funcionar y se olvidan las preocupaciones, pero si no
se esta concentrado se te puede ir la pinza y decir cosas que no quieres como
así le ocurrió a Jorge que por bocazas delato que se ha creado un grupo
“para-lelo” para quedar con las flacas.
Polémicas a parte que surgirán
después de publicar estas líneas, nos vamos acercando a la base de la Sierra de Cantabria
envuelta en una niebla baja que poco a poco se va levantando, después de subir
las primeras rampas llegamos a un cruce donde hay un cartel de Batida. Pensamos
en pasarlo pues los cazadores se veían por el cortafuegos de la derecha y
nosotros íbamos hacia la izquierda pero un cazador nos acabo de convencer. Con
poco de mala leche pues no nos esperábamos batidas a principios de septiembre y
abatidos bajamos a la carretera y nos dirigimos por ésta hasta Meano para dar
la vuela al León. Últimamente estamos puliendo las cubiertas y machacando la
mecánica de las bicis de tanto asfalto que estamos rodando.
La vuelta al León bonita y
asequible como siempre, bonitas sendas, vistas espectaculares y billetes de 50€
tirados en los barrancos como así vio Oscar. La vuelta por el camino de la Población hacia Oyon,
donde en la granja vemos que esta cortado el camino por otra batida, aunque a
esta ya estaban quitando el cartel y podando para abajo llegamos a Logroño donde
estaban terminando de desmontar el tinglado del Maratón que Sergio y Ricardo se
encargaron de dejar el pabellón de los Desorientados donde se merece.
No hay comentarios:
Publicar un comentario