By Ivan:
Cómo el Sabado por la noche alguien
activó el detector de maricas quedamos en el surtidor de las gaunas sólo
cuatro. Oscar, Jorge, Alvaro y yo con pocas ganas la verdad.
Tras
varios tiras y aflojas decidimos entre todos hacer el Mantible por las
trialeras. Empezamos la marcha y al llegar a las primeras rampas pasando
el camino del antiguo basurero alguien ya daba muestras de cansancio,
hasta necesitó que le esperaran en el inicio de la primera trialera.
Aunque parezca increible fue el único que la subio sin bajarse de la
gorda y arriba pudo descansar y casi acabar con todos los viveres que
llevaba.
Una vez recuperados seguimos el camino, pasamos por la
granja de cerdos de pata negra sin problemas a pesar de la avalancha de
estos. En las trialeras tuvimos el primer escapado, el que pesa 70 kilos
bajaba como las motos y otro iba detras sin apenas problemas (bueno en
los salientes que parecen escalones desmonto pero sólo una vez). Una vez
abajo a esperar a los otros dos que iban de senderimo.
Tras un nuevo
reagrupamiento, llegaron los pinchazos a la altura del regulador de
caudal que hay antes de la presa, donde nos detuvimos poco
tiempo....unos 45 minutos.Pinchazo, cambio de cámara por una nueva,
imposible de inchar tras varios intentos y varias bombas, acabamos
parcheando la primera, ya que la nueva tenía una raja en la que podiamos
meter un dedo. No seais mal pensados...
Superado
el incidente seguimos el camino sin prisa hasta las rampas pasando
Fuenmayor, donde en la cima hubo que esperar a la tortuga de siempre (es
que algunos salen sin preparse). Como no foto de rigor y a seguir el
paseo dominguero.
Ya en la pineda antes de
la última trialera por supuesto reagrupación y para abajo. El de
siempre el primero (que era el único que la conocía) y los otros detrás,
unos en btt y otros siguiendo con el senderismo. Bajando ya sin
problemas algunos se armaron de valor y se subieron en la montura,
echandole un par a gritos de "soy el mejor" , "Dios, siii"...
Al
final de la trialera el fotografo hizo el salto de la rana con cierta
elegancia, dejando la bici en los matorrales y saltando por encima tipo
prueba de bomberos, muy bonito la verdad.
Otra
de fotos y seguimos que se nos hace tarde. Decidimos acabar rápido
dejando la última parte del Mantible sin hacer. Volvemos hacia Logroño
por medio de un viñedo hacia Avenida de Burgos, donde alguno por mirar
hacia otro lado hizo un caballito de 180 grados pero con la rueda
delantera en el suelo, por suerte sin consecuencias. Ya en la rotonda de
Portillejo nos despedimos jurando no contarlo nunca, pero yo cómo hacía
mucho que no me reia tanto no he podido evitarlo y compartirlo con
todos.
Por cierto, no nos llovío cómo pronostico el gurú del
grupo, sólo fue una nube de esas tontas que deciden seguierte durante
hora y media.
Ostia!! Ivan eres terrible
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